24 de noviembre de 2018.- El comandante general de la Policía, Faustino Alfonso Mendoza Arze, señaló que se ya logró identificar a uno de los instigadores del linchamiento de los dos jóvenes en Uncía (Potosí). De acuerdo a la autoridad se tomarán las medidas necesarias para hacer justicia informó ayer.
“El linchamiento es un delito y nosotros, como autoridad, tenemos que hacer cumplir las leyes y determinar la pena máxima conforme lo establece el Código Penal”, dijo.
Por otra parte, el director departamental de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de La Paz, Jhonny Aguilera, dijo que, según la Organización de Naciones Unidas (ONU), Bolivia es el segundo país de la región donde se registran más linchamientos.
“Bolivia está en el segundo puesto a través de una estadística que hace la ONU, lo que significa que hay un irrespeto por parte de estas turbas criminales a la vida y derechos de cualquier ciudadano que puedan encontrarse o no involucrado en un delito”, indicó el jefe policial.
Asimismo, el Representante del Defensor del Pueblo en Cochabamba, Nelson Cox, manifestó que existe un alto nivel de alarma social, porque no se respete la institucionalidad del Estado, la Policía e incluso personeros de la Defensoría del Pueblo.
Algunas personas están usurpando los roles que competen a los policías, fiscales, jueces, y son ellos quienes están determinando la muerte de otros individuos, como lo que sucedió en días pasados en San Julián – Santa Cruz- y Uncía -Potosí, dijo.
“Hay necesidad de una intervención urgente para restablecer el respeto al Estado, a los derechos fundamentales, a la institucionalidad que debe primar en cualquier escenario democrático”, aseguró Cox.
El Delegado Defensorial aseguró que, tras el hecho luctuoso en Potosí, su organización está tratando de colaborar con los familiares de los jóvenes bajo el criterio humanitario.
La Defensoría intervino para facilitar que los cuerpos de Alex Quispe y José Luis Ibarra sean trasladados de la morgue del hospital Madre Obrera de Llallagua hasta Cochabamba y sean entregados a sus familiares.
“Se coordinó con la Delegada Departamental de Potosí, Villma Martínez, y los restos llegaron a esta ciudad la noche del jueves”, dijo el Defensor del Pueblo de Cochabamba.
Por su parte, la familia de los linchados se encargó de tramitar el traslado de los restos mortales de sus seres queridos a una localidad del Trópico cochabambino, ya que la familia tenía su hogar en esa región.
ANTECEDENTES
El primer hecho de linchamiento se efectuó la madrugada del martes, cuando colgaron en la plaza principal de San Julián a el brasileño Vinicius Chagas Maciel (32), sindicado de haber intentado atracar con un arma de fuego a un agricultor soyero cuando llegaba a su casa. Al día siguiente, miércoles, dos jóvenes, de 17 y 19 años, fueron lapidados hasta acabar con su vida, luego de ser sindicados de asaltar un vehículo y fueron juzgados por una turba en Uncía.
(Opinión)