14 de septiembre de 2018.- La sesión de honor por el aniversario número 208 de Cochabamba terminó de manera bochornosa y dramática por la tensión que se registró desde un inicio entre asambleístas del MAS y oposición, que derivó en agresiones, empujones y la expulsión de legisladoras del salón del centro de convenciones El Portal.
El conflicto empeoró cuando el vicepresidente Álvaro García Linera recibió la distinción Libertad del Tunari y un grupo de asambleístas de la oposición comenzó a gritar “Bolivia dijo No”. Luego, al tomar la palabra el Vicepresidente, la asambleísta de La Paz Claudia Bravo (UN)continuaba filmando y gritando “Bolivia dijo No” y fue echada por la propia presidenta de la Brigada Parlamentaria, Carola Arraya, quien se bajó de la testera para eso.
“No creíamos que se atreverían a tanto, nos han venido a empujonear, ha venido la autoridad de la presidenta de la Brigada a sacarme. Una total vergüenza. Tengo los brazos llenos de moretones, son los costos por reclamar por la democracia”, sostuvo Bravo. Cuestionó el reconocimiento otorgado a García Linera: “Es dar una premio a alguien que se está haciendo la burla de nuestro voto”.
Minutos después de lo sucedido, se presentó un segundo incidente. La asambleísta Lizeth Veramendi (Único) fue agredida por tres asambleístas suplentes del valle alto del MAS, quienes, luego de la agresión, evitaron hablar e identificarse.
Al gritar “Bolivia dijo No”, Veramendi recibió el golpe de las asambleístas del MAS y jaloneos a su vestimenta. En respuesta, resistió con empujones por varios pasos desde donde estaba sentada hasta el fondo del salón. Finalmente, Veramendi salió del predio.
“Me siento indignada porque estas asambleístas son personas que quieren ocultar la corrupción acudiendo a la violencia, saben que han perdido (…) Evo no está porque tiene miedo”, afirmó.
Mientras esto sucedía, el Vicepresidente desestimaba los gritos y comentó que eran ofensas para Cochabamba.
“El tamaño de sus gritos es del tamaño de su ignorancia y la democracia de la que hablan es el insulto. Ya verán que vamos a ganar otra vez con el voto”, aseguró.
(Los Tiempos)