23 de noviembre de 2018.- El entrenamiento a puertas abiertas de Boca superó cualquier expectativa previa. Los hinchas del Xeneize asistieron al estadio en masa y la capacidad de La Bombonera quedó chica para albergar a tanto público. Por este motivo, el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires clausuró el estadio una vez que se retiraron los hinchas. Ahora, los dirigentes del Club de la Ribera trabajan a contrarreloj para levantar la clausura del estadio.

Desde el gobierno de la Ciudad, señalaron que para lograr que el estadio quede habilitado, el Xeneize deberá pagar una multa. “Es una falta de las que denominamos fugitivas. No es una falta relativa a la seguridad del estadio propiamente dicha. Boca deberá pagar hoy una multa para levantar la sanción», dijo Gustavo May, Director General de Fiscalización y Control del Gobierno de la Ciudad.

May explicó los motivos de la clausura al estadio Xeneize. «Cuando comenzó a cerrarse el primer vallado perimetral, el público comenzó a golpear esas vallas y luego a saltar los molinetes, superando la capacidad permitida del estadio», comentó el funcionario respecto a los miles de fanáticos que rebalsaron La Bombonera.

No trascendió el monto de la multa que deberá pagar el equipo presidido por Daniel Angelici pero –para el dinero que mueve el Xeneize- no sería una cifra de consideración. Por eso, los abogados del Club de la Ribera desde que se puso la faja de clausura, comenzaron a moverse para conseguir la habilitación de La Bombonera lo antes posible.

Es que tanto Boca como los organismos de seguridad de la Ciudad y de la Nación pretenden que La Bombonera esté habilitada para mañana. En caso de que el Xeneize se consagre en el Monumental, la idea de la Comisión Directiva de Boca es que los fanáticos del elenco dirigido por Guillermo Barros Schelotto asistan al estadio para un eventual festejo y así evitar que los hinchas vayan hacia el Obelisco por temor a un posible enfrentamiento con hinchas de River.